15 de marzo de 2010

El Entierro de los Muertos- (fragmento).




¿Cuáles son las raíces que arraigan, qué ramas crecen


en estos pétreos desperdicios? Oh hijo del hombre,


no puedes decirlo ni adivinarlo; tú sólo conoces


un montón de imágenes rotas, donde reverbera el sol,


y el árbol muerto no cobija, el grillo no consuela,


y la piedra seca no da agua rumorosa. Sólo


hay sombra bajo esta roca roja


(ven a cobijarte bajo la sombra de esta roca roja),


y te enseñaré algo que no es


ni la sombra tuya que te sigue por la mañana


ni tu sombra que al atardecer sale a tu encuentro;


te mostraré el miedo en un puñado de polvo. [...]




Ciudad irreal,bajo la parda niebla del amanecer invernal,


una muchedumbre fluía sobre el puente de Londres, ¡eran tantos!


Nunca hubiera yo creído que la muerte se llevara a tantos.


Exhalaban cortos y rápidos suspiros


y cada hombre clavaba su mirada delante de sus pies.


Cuesta arriba y después calle King William abajo,


hacia donde Santa María Woolnoth cuenta las horas


con un repique sordo al final de la novena campanada.


Allí encontré un conocido y le detuve gritando:


¡Stetson!¡tú que estuviste contigo en los barcos de Mylae!


¿Aquel cadáver que plantaste el año pasado en tu jardín,


ha empezado a germinar? ¿Florecerá este año? ¿No turba su lecho la súbita escarcha?


¡Oh, saca de allí al Perro, que es amigo de los hombres,


pues si no lo desenterrará de nuevo con sus uñas!


Tú, hypocrite lecteur! -mon semblable -mon frère!




La tierra baldía, T.S. Eliot

2 comentarios:

memento mori dijo...

historia para no dormir y que te hace pensar, que el tiempo y el hombre te quieren contar una realidad que no es verdad, es por eso que quiero leer mas...por eso y por que me gustaria que una ilusion o la morfina te hizieran aparecer angel de la guarda....de sueños vive el hombre y todos los sueños se acaban.

LaNieblaesRubia dijo...

Los hombres huecos de Eliot son escalofiantes...
Y los sueños pueden tatuarse.