6 de abril de 2012

El jardín de las mujeres desechables


Él caza en el jardín de las mujeres desechables. No quiere victorias decisivas. Miles de "cajas negras" exudan los infames olores de los jardines asolados. Todo precariedad, todo inestabilidad, todo vulnerabilidad. La glucosa, la consigna, es un "hasta que estemos satisfechos". La obsolescencia no existe, la derrota no existe, los vínculos no existen; las mujeres se pierden extrañamente en el campo, y él sigue cazando, economizando sus movimientos, pero progresando en su noche sin profecías. El desprendimiento es unilateral, y él es el agua que Tántalo quiere beber y se escapa por algún agujero invisible.

8 comentarios:

clausura dijo...

¿Será la inestabilidad por cazar a la intemperie?

Anónimo dijo...

esperando la soga de Artaud

Soy Leyenda dijo...

Vuelve

Soy Leyenda dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Matias Rivera Baeza dijo...

¿Y qué fue de ti, qué fue de mi y de todos? Saludos después de tanto tiempo. Faceinstone

Mireia Dedalus dijo...

"I was so fond of you, and I still watch it!"

De mí han sido años. He dominado la barbarie. Ya no escribo; soy profesora de Latín, Griego y Lengua castellana en una academia pequeña. Quiero volver a escribir, pero hallo demasiada paz a mi alrededor. A veces, una tormenta sería un consuelo, como en ese cuadro de Friedrich. Mi única voluptuosidad sigue siendo la lectura. ¿Y qué hay de ti? ¡Me has devuelto a la vida!

Matias Rivera Baeza dijo...

Faceinstone tampoco escribe más. Al igual que tú, la tranquilidad de volver a tener el amor en mi vida apagó mi pluma, que se alimenta más de la pérdida que del encuentro y de la soledad más que de la compañía: supongo que algunos sólo podemos hilar la tristeza y el desvarío. Barbarie he tenido, el amor a mi alrededor siempre termina en barbarie, pero ha sobrevivido los años, como una copa trizada que me da un vino embriagante mientras me hace sangrar, all in wrapped in one product.

¿Latín y Griego? ¿Creerás que cuando me gradué de Filosofía, podía leer la metafísica en griego, y ahora apenas puedo manejar el presente indicativo e hilar con suerte 40 palabras? Extrañamente, del griego y el latín me quedan frases sueltas, pero el francés que reaprendí en la U me ha servido (traduzco e interpreto).

Bueno, esperemos las tormentas, pero siempre buscando la luz. Un abrazo Mireia, desde las palabras que nunca tendrán cara ni voz.

Matias Rivera Baeza dijo...

https://miscelaneanddebris.blogspot.cl/?zx=28031f84cb0e91af

por si te interesa revisar uno más de mis blogs. Es tan triste escribir y que nadie ya lea... No se por qué me obstino en volver a blogger cada cierto tiempo, si ya nadie lo usa...

A propos, quisiera volver a estudiar griego y latín. ¿Hay algún texto de estudio que me puedas recomendar?

Saludos desde palabras que nunca tendrán cara ni voz.

Faceinstone